“La menopausia ya no es lo que era”. Esa frase sirvió de inspiración para crear No Pausa, una plataforma digital que entrega educación, soporte y servicios dirigidos a las 42 millones de mujeres que viven hoy la perimenopausia en Latinoamérica. Y es que, —según datos publicados por No Pausa—, el 70% de las mujeres no sabemos realmente qué es la menopausia y desconocemos la mayoría de sus síntomas. 

La menopausia ya no es lo que era, pero todavía es un tabú del que se habla poco y siempre en voz baja.

Milagros Kirpach (29) es argentina y periodista especializada en comunicación digital. Hace casi 5 años, a partir de una conversación con quien había sido una de sus mentoras en la universidad, se dio cuenta de la profunda contradicción que significa vivir en una época de empoderamiento femenino y, al mismo tiempo, relegar la menopausia a una fase oscura de la vida de la que nadie quiere hablar. Mucho menos experimentar. “Si miramos desde un punto de vista sociocultural,  la menopausia (o el climaterio) es el fin de la vida reproductiva. Nuestro rol histórico en la sociedad ha sido el de maternar, dejar de menstruar tiene un peso en el inconsciente colectivo muy fuerte”, explica.

A pesar de estar todavía lejos de la perimenopausia, cuando Milagros supo de las experiencias de otras mujeres que llegaban a esta etapa en un total desconocimiento de lo que pasaba con sus cuerpos, sintió que necesitaba hacer algo “por la Mili del futuro” y por todas las mujeres que han visto su vida impactada negativamente por no tener acceso a información y asesoría. Así, junto a Miriam De Paoli, en 2018 fundaron No Pausa con el objetivo de generar una comunidad y red de apoyo para mujeres que quieren enfrentar la menopausia con herramientas y no desde el desconcierto y el prejuicio. 

Porque, todavía hoy, la menopausia es una etapa de la biografía hormonal de la mujer que se asocia a la vejez y a una especie de fecha de vencimiento a la que sólo podemos aproximarnos con resignación. “La menopausia es una etapa que toma relevancia en el siglo XXI como nunca antes. Hace 70 años la expectativa de vida era alrededor de 59 años y dejábamos de menstruar a los 57”, explica Milagros. Hoy, con una expectativa de vida promedio de 82 a 83 años y la fecha de la última menstruación que se estima ocurre a los 50 años aproximadamente, al menos un tercio de nuestra vida transcurre después de terminada la etapa de fertilidad. “Antes vivíamos sólo 2 años después de nuestra última menstruación”, explica Milagros. “Hoy estamos hablando de que vamos a vivir al menos un tercio de nuestras vidas después de la menopausia. Y eso ni siquiera contempla el que los cambios hormonales y la primera sintomatología comienza a mediados de los 40”.

Si bien hay distintos factores que han generado la invisibilización de toda una era de la vida de las mujeres (entre 10 y 15 años de la biografía menstrual) y que es tan natural y relevante como la pubertad en la adolescencia, Milagros aclara que la asociación entre menopausia y el tabú de envejecer es una de las grandes barreras que nos impiden informarnos. “Todavía hay un estereotipo de menopausia que no aplica en la realidad de las mujeres que atraviesan esta etapa en el año 2024”, explica la cofundadora de No Pausa. Lejos de una supuesta caducidad, Milagros explica que “las mujeres +40 hoy están en el peak de su desarrollo profesional y personal. Ocupan posiciones de liderazgo y de toma de decisión”. Por eso, desde No Pausa la propuesta es vivir la menopausia como un proceso que se aborda con apoyo y redes.

Desde el 2023, además de derribar mitos en torno a la menopausia, No Pausa ofrece asesorías de salud a cargo de profesionales médicos y de nutrición que contemplan las distintas aristas e implicancias de esta transición. Entender la menopausia desde una mirada integral es lo que marca la diferencia. “En promedio, una mujer en climaterio y menopausia puede nombrar entre 3 y 5 síntomas”, explica Milagros. 

Los efectos más reconocidos y asociados a la menopausia son los sofocos o calores, los cambios en la libido, el aumento de peso y los cambios emocionales. Sin embargo, Milagros aclara que durante este proceso pueden observarse más de 34 síntomas que afectan distintas dimensiones de la salud. “Los menos conocidos van desde brain fogs o nieblas mentales, a la resequedad de las mucosas bucales, oculares, tinitus, cambios en el ph, calambres, migrañas, etc.”. Y solo 1 de 5 mujeres llega a conectar esos síntomas con su causa: la menopausia.

Si bien la menopausia es un proceso de cambios hormonales inherente a la vida fértil de una mujer, el panorama para quienes la viven ha cambiado muchísimo en las últimas décadas. Poco a poco, lo que viene después de la ventana fértil de una mujer ha ido convirtiéndose en una fase más extensa y relevante de la experiencia femenina. Pero, culturalmente, no le hemos seguido el paso a estos avances. “Tanto para la sociedad como para los sistemas de salud y las comunidades académicas, la menopausia es una etapa con una dimensión relativamente nueva”, explica Milagros. Y esto se refleja en las estadísticas: Milagros explica que menos del 20% de los médicos están formados en climaterio y menopausia y se estima que un 80% de las mujeres ven un impacto negativo en su calidad de vida producto de la menopausia.