Cuesta imaginarse que Augusta Quiñones (26), abogada de la Universidad de Chile sea la creadora de The Simple Life, una plataforma que nació por su gusto por llevar una vida simple y su concientización frente a distintas temáticas. Su cuenta ya tiene con 53.9K en Instagram y nació con una premisa simple: recetas saludables, con menos de 10 ingredientes y que tarden máximo 30 minutos en su preparación.

Augusta rompe con los prejuicios que uno pueda tener de ciertas profesiones. Si bien se desempeña como abogada en el rubro de la construcción, también comparte otras pasiones como la música (toca el ukelele y el violín), es amante de la lectura, le fascina jardinear y se apasiona por la cocina. Desde ahí desarrolla su inquietud por comer rico y sano, sin mayores complicaciones.

¿Cómo una abogada se transforma en una influencer foodie saludable?

Toda la vida he cocinado y realmente disfruto enormemente comer. The Simple Life nació cuando estaba de intercambio en la Universidad de Sydney en 2015, tenía tiempo libre y muchos amigos que también estaban de intercambio, que me pedían recetas fáciles, rápidas, ricas y relativamente saludables... Siempre había tenido el bichito de partir un blog de recetas y me lancé: aprendí a programar, armé mi página, y empecé a inventar recetas y sacar fotos. Cuando volví del intercambio pude dedicarle mucho tiempo y de a poco se fue formando una linda comunidad. Con eso surgieron distintas oportunidades de colaboración con marcas, empresas y hasta pude cumplir mi sueño de publicar mi propio libro (Snacks ricos, fáciles y secretamente saludables) de recetas. ¡A veces me cuesta creer todo lo que ha crecido este proyecto!

¿Cuál es el sello de 'The Simple Life'?

The Simple Life son recetas (secretamente) saludables, con menos de 10 ingredientes y que demoren 30 minutos o menos en estar listas, usando ingredientes de fácil acceso. A veces, puede que algunas preparaciones escapen un poco del concepto, pero busco ese equilibrio.

¿A quiénes está dirigido?

A todas las personas que quieran comer rico, sano y sin complicaciones. Sé que mis recetas las siguen hombres y mujeres de todas las edades, aunque, curiosamente, ¡en el blog el grueso de las visitas son hombres de entre 25 y 35 años!

¿Cómo tomas la responsabilidad que tienes al tener una comunidad de 53.8K?

Este es un temazo para mí. Siempre he tratado de mantener The Simple Life como una comunidad que gire en torno a las recetas y comida en general, procurando separarlo de quien soy yo como persona y tratando de mantener una cierta neutralidad... Pero al final, obviamente, hay mucho de mí en las recetas, en las fotos, en las historias detrás de cada post en el blog o en Instagram. Además, siento que tener un canal que llegue a tanta gente conlleva una enorme responsabilidad y al final hay temas en los que siento que no puedo ser neutral. Por ejemplo, no puedo dejar de compartir datos/estadísticas respecto de todo lo que es abuso sexual, o de compartir tips y datos de ecología (o para reducir nuestro impacto ambiental), incluso compartir datos de ayuda ante diversas catástrofes o contingencias. Sé que escapan del objeto detrás de mi blog y redes sociales, pero son temas que para mí son importantes de visibilizar, por una responsabilidad social.

¿Cómo convalidas tu pasión con tu trabajo diario?

Cuando partí trabajando en mi ‘lado A" se me hizo MUY difícil. Siempre he sido auto exigente con el blog, lo consideraba como un trabajo: programaba y generaba contenido con al menos 4 meses de anticipación (y así lograba publicar al menos una receta nueva en la web todos los lunes, más una que otra extra por Instagram), trabajaba activamente generando contenido para marcas, yendo a eventos, etc. Creo que esa parte es la más compleja porque demanda mucho tiempo. Hoy, claramente, tengo menos tiempo libre y muchas veces prefiero darle prioridad a estar con mis amigos/familia o a mis otros hobbies antes de dedicar 10 horas o más de tiempo a una receta. Creo que este último año y medio ha sido una tremenda lección para soltar y tomarme esta pasión justamente como eso: un escape creativo, un espacio de distensión. Y GOZO los días en que me dedico a cocinar, sacar fotos y escribir.

¿Cómo ves tus próximos pasos con TSL?

Por ahora me lo tomo con calma, pero mi sueño es a futuro poder crear una fundación enfocada a fomentar la alimentación saludable y aportar con un granito de arena a combatir la epidemia de malnutrición/obesidad que vivimos en Chile.

¿Nos dejas un consejo para el desayuno?

Para mí, la clave de un buen desayuno es dejarlo preparado (o al menos pensado) la noche anterior. Uno de mis desayunos ‘go-to’ es el porridge y esta receta de porridge de chocolate con coco, es imbatible. En verdad se me ocurren pocas cosas mejores para partir el día que comer chocolate.