Liderazgo Femenino

La importancia del liderazgo femenino

Mucho se ha hablado del liderazgo femenino. Y es que el ingreso de las mujeres al mercado laboral ha transformado nuestra cultura, llevándola a un punto de inflexión. Los modelos tradicionales a nivel de organización laboral, y especialmente los de familia -donde antiguamente el cuidado de los hijos era responsabilidad de las madres-, ya no responden a las necesidades de los ciudadanos, a los requerimientos de las empresas para ser y permanecer competitivas, ni a los retos que tenemos como sociedad. 

En su libro “Liderar desde lo femenino”, la ingeniera Tatiana Camps entrevistó a 40 mujeres buscando comprender e identificar los rasgos que definen el estilo de conducción y que representan activos valiosos para las organizaciones y sus dinámicas de trabajo. “La principal motivación de las mujeres para asumir posiciones de mayor liderazgo, responsabilidad o poder es la posibilidad de impactar positivamente a las comunidades en las que participa”, dice. 

¿Qué ventajas tiene que una organización, empresa o país esté a cargo de una mujer? ¿Existe un estilo femenino de liderazgo? Según la autora, junto a la capacidad de tomar decisiones audaces, el cuidado por los equipos, la empatía con el contexto, la tendencia a compartir (y no disputar) el poder, la colaboración y el diseño de lógicas con estructuras horizontales, no jerárquicas ni autoritarias, son parte de algunos de sus mejores atributos. “Liderar desde lo femenino es un estilo de relación, es una manera de pararse en el mundo, una manera de generar cultura que cambia la forma cómo la organización se estructura y va generando valor”, explica Camps.