La relación maternidad y trabajo, históricamente, ha sido un tema complejo de resolver. En Chile, existen una serie de políticas que buscan incentivar y proteger los derechos de las mujeres y hombres que deciden tener hijos. Pero, ¿conocemos de qué se tratan? 

• Prenatal: Descanso de al menos 6 semanas antes del parto.
• Posnatal: Descanso de al menos 12 semanas después del parto.
• Derecho a sala cuna: Es el derecho de toda trabajadora, con un hijo menor de dos años, a que su empleador le proporcione una sala cuna. Sin embargo, se exige su cumplimiento legal solo  si la organización cuenta con 20 o más trabajadoras contratadas. 
• Fuero maternal: Es el derecho de toda mujer trabajadora a no ser despedida por su empleador, durante el embarazo y hasta un año después del descanso de posnatal. 
• Derecho para alimentar a los hijos menores de 2 años: Es el derecho que se le otorga a las mujeres para que puedan alimentar a sus hijos. Este permiso es de máximo 1 hora. 
• Posnatal parental: Este derecho es para los padres trabajadores que, luego de sus cinco días legales, pueden pedir algunas semanas de posnatal (seis semanas a jornada completa como máximo). Eso sí, solo en caso que la madre ceda esos días de su permiso. 

A pesar de contar con estas medidas, aún falta mucho por avanzar. No solo en la extensión de derechos -como ampliar la sala cuna universal o avanzar hacia un posnatal parental más ambicioso-, sino en cuanto a corresponsabilidad en los hogares. Es ahí donde se juega gran parte de los desafíos de la incorporación femenina al mundo del trabajo. 

Según el estudio "Radiografía al Hombre Cero", realizado por la Universidad Católica en conjunto a ONU Mujeres y el Ministerio de la Mujer y EG; un 38% de los hombres dedicó cero horas semanales a tareas domésticas durante la crisis sanitaria. Una cifra que da cuenta de la denominada triple jornada laboral -maternidad, mundo laboral y trabajo doméstico- que asumen muchas mujeres en sus hogares.